Iten, llamado Aton por los griegos, es el Dios que representa al Disco Solar en el firmamento.
Fue el primer Dios adorado en patios al aire libre, lo que le convirtió en el primer dios accesible para el pueblo.
Se le conoce como el Dios creador del Hombre y los animales y el EspÃritu que alimenta al Mundo.
En las primeras representaciones del Dios, aparece con forma de hombre con cabeza de halcón. Sin embargo, posteriormente, se lo representa sólo como un disco solar del cual se desprenden rayos sobre unas manos extendidas y criaturas vivas.
Cuando una de las manos está sobre el rey o la reina, lleva el anj (suerte de cruz ansada, con un óvalo en su parte superior).
Es un dios autocreado, por lo que no se le reconocen padre ni madre.
Tampoco se le conocen dioses descendientes, aunque sà se lo considera el creador del hombre y los animales. El único hijo que se menciona en las escrituras, fue el propio Akenatón (teológicamente, era el único hijo y profeta de Atón).
Fue el primer Dios de cultura monoteÃsta. En épocas de Ajenatón (Akenatón), se lo consideraba el único dios, aunque esto duró poco tiempo, ya que el sucesor de Akenatón, Tut-anj-Amón restauró el politeÃsmo.
En tiempos de Akenatón, el santuario principal de Atón se encontraba en Ajetatón (que significa "El Horizonte de Atón y es, actualmente, conocida como Tell el Amarna).
Akenatón construyó cinco templos dedicados a su dios. En el norte de Egipto, el culto a Atón se difundió en Heliópolis (La Ciudad del Sol, actualmente conocida como Tell Hisn, capital del nomo XIII del Bajo Egipto), Menfis (capital del nomo I del Bajo Egipto, actualmente conocida como Mit Rahina), también aparecen lugares de culto en Sudán, más allá de la tercera catarata.
A pesar de haber sido impuesto como dios único, los egipcios seguÃan rindiendo culto a sus antiguos dioses.
Con la muerte de Akenatón y la toma de poder de Tut-anj-Amón y los sucesivos faraones, muchas de las referencias a Atón fueron destruÃdas. Una de las pocas que se conservan, fue el Himno a Atón, escrita por Akenatón y considerada una de las maravillas literarias de la cultura faraónica.